El nombre de Francho Serrano se convirtió en noticia el pasado miércoles tras conocerse el resultado positivo en la prueba de Covid-19 que le fue realizada. El jugador presenta síntomas leves y se encuentra en su domicilio cumpliendo con el confinamiento pertinente de, al menos, 10 días desde que se conoció su positivo en Covid-19.
La inesperada baja del centrocampista zaragozano deja un hueco en la medular del Real Zaragoza, mermado durante al menos dos partidos, ya que el día 6 de marzo se cumplirían los 10 días desde conocer el positivo de Francho, misma fecha en la que el equipo se enfrenta contra el Tenerife en La Romareda. Ante la indisposición del canterano zaragocista para las dos próximas jornadas, Juan Ignacio Martínez deberá encontrar un sustituto que supla a Francho. El míster zaragocista no cuenta con demasiadas alternativas, ya que a la ausencia de Francho se suman las de Juan Manuel Sanabria y Javi Ros, ambos lesionados.
Por tanto, las pocas opciones que baraja ‘JIM’ para paliar esta situación, en caso de continuar con el habitual sistema (4-1-4-1), se reducen al capitán Alberto Zapater y a Adrián González. Más probable es que el centrocampista que forme pareja con James Igbekeme por delante de Íñigo Eguaras sea el madrileño, que no ha contado con la confianza de ninguno de los tres técnicos que esta temporada han dirigido al conjunto maño. Adrián solamente ha aparecido en nueve citas ligueras con el Real Zaragoza, no completando en ninguna los 90 minutos de partido. Los -al menos- 10 días de baja de Francho Serrano pueden suponer la gran oportunidad del veterano mediocampista para reivindicarse, comenzando por el encuentro de este domingo contra el Real Oviedo.